Por: Ari Gómez
Ingeniería Social, Marketing .
Las veces que uno observa los errores politicos que cometen los partidos de nuestra nación y las veces que uno se pregunta cómo es que no aprenden de ellos, hacen que se cree la imagen de incapacidad, terquedad, ganas de hacer las cosas mal o por el contrario, nos hacen ver una super inteligencia capaz de que lo malo para nosotros es bueno para ellos.
Voy a ser breve e iré al grano. El Partido de la Liberación Dominicana nos está dando un ejemplo claro de lo que es echar el pleito equivocado. Eso, por lo menos es lo que se ve desde afuera, quizás en las intríngulis de la organización se está trabajando una idea que nosotros no sabemos, podemos equivocarnos, claro que sí. Talvez la estrategia de poner a su militancia a pelear con el Partido Revolucionario Moderno es una táctica para mantenerles el entusiasmo y la creencia de que hay probabilidades de regresar al poder. Danilo Medina sabe que no regresarán, por lo menos en el 2024, Abel Martínez sabe que no va a ganar las elecciones de 2024, pero azuzan a su militancia a pelear con el que está en primer lugar y eso les insufla ánimos y visión de regreso al poder.
Danilo y Abel saben que sus posibilidades son de un segundo lugar y que el pleito es con el que le disputa esa posición, la Fuerza del Pueblo. Leonel Fernández procura matar dos pájaros de un tiro: asegurar el segundo lugar y de paso saborear la dulce venganza contra un PLD que en un momento de fortaleza lo humilló e hizo ir de sus filas pero que ahora está alicaído y vulnerable.
Todo el que tiene dos dedos de frente sabe que la lucha del PLD debe ser para asegurar el segundo lugar y a eso vino Danilo, a evitar que la Fuerza del Pueblo se engullera al PLD a la velocidad que lo venía haciendo. Lo asombroso es ver a una militancia que no lo entendió tratando de saltarse un peldaño mientras el otro partido de la oposicián le serrucha la escalera.
¿O es que se acuestan a soñar una alianza que cada vez se torna mas difícil y se pone más lejos? ¿Una alianza que se dará en los municipios donde la FP no tiene nada y el PLD ha perdido la fuerza? ¿Una alianza que los hace más pequeños? Dicen que lo peor que le puede pasar a un ser humano es encontrarse con el que se quiere morir.
Pero a la vez es extraño ver un candidato que sabe que no va a ganar (o está enajenado) conminando a la militancia a enfrascarse en una lucha de tercero contra primero sin pasar el segundo. Si no lo quieren admitir porque lo digamos nosotros desde aquí -que es la tendencia del fanático- que tomen las últimas mediciones de intención electoral y van a ver el retrato clarito: Cuando Abel baja, Leonel sube y viceversa, mientras Abinader ni se entera de su sube y baja, porque no le afecta.
Si no lo entienden, deberían revisarse.