La verdad es el mejor camuflaje. ¡Nadie la entiende! - Max Frisch
Por: Ari Gómez
Ingeniería Social, Marketing
28 de noviembre de 2023
En mis publicaciones de redes sociales yo decía que la aritmética electoral y la aritmética común no era igual. Iba más lejos, tratando de que el enunciado fuera más entendible, más digerible. Hice una comparación sencilla entre la guerra y las elecciones para explicar de manera llana y simple las diferencias cuando se cuentan bajas y votantes.
Explicaba que en una guerra, cuando un ejército le proporciona diez bajas a otro en una batalla, solo logró eso, desaparecer diez enemigos del campo, no fue que desertaron y se sumaron al pelotón contrario, pero que en política electoral, cuando usted asesta una baja al enemigo político, el efecto es doble. Un voto menos por un candidato, a la hora del escrutinio, representa una ganancia para el contrario del que perdía el voto. ¿Por qué? Porque en el conteo electoral se gana de dos maneras, sumando a su favor y restándole al contrario.
Todo esto viene a colación por las alianzas que ha logrado hacer el sector oficialista con un grupo numeroso de partidos que van a apoyar la candidatura de Luis Abinader en las próximas elecciones. La mayoría de esos partidos -para no decir casi todos- apoyaron a lo que hoy es la oposición electoral, por lo tanto, ya no pueden contar con ellos y lo poco o lo mucho que aportaron son una merma en el caudal de votos obtenido por los partidos que los llevaron de aliados en las elecciones de 2020. Entonces, si restamos esos votos y se los sumamos a la candidatura oficial, hay que multiplicar por dos, porque si restas dos allá y sumas dos aquí, el efecto es doble.
Hubo muchos respingos y argumentaciones sobre mi teoría, pero al hacer la matemática no hay manera de que no sea así. Nadie ha podido, con números, desmentir esa aseveración, por lo que los considero como simples pataleos sin sentido.
Me conminaron también en las redes a hacer una analogía entre la alianza llamada Rescate y las alianzas que ha hecho el oficialismo, eso es imposible, ninguno de los partidos que participan en la alianza opositora fue aliada al Partido Revolucionario Moderno en el ámbito presidencial en las elecciones de 2020, por lo que no se pueden comparar, no hay pérdida de votos en ese sentido del lado reeleccionista.
Esta ilustración extraída del libro "Resultados Electorales Nivel Presidencial 1062-2020, de la autoria del amigo Roberto Rodríguez Rodríguez y que a su vez reflejan los números opficiales de la Junta Central Electoral, nos dice claramente que la suma de los partidos aliados al oficialismo y de acuerdo a los resultados de 2020, por lo menos, los que aparecen ahí, van a aportar sobre 350,000 votos -siempre de acuerdo a lo que dijo la JCE en su informe- lo que representa una cantidad muy considerable.
Nadie puede asegurar que obtendrán la misma cantidad, si será más o será menos, pero de que representan un volumen que decidiría unas elecciones, lo es, ciertamente. Pero lo interesante es que esos votos hay que restarlos a la oposición, que por medio de unos acuerdos han decidido juntarse para formar un bloque al que le han llamado "rescate". Es decir, ya de antemano, ese bloque va a las elecciones con alrededor de 350,000 votos menos de los partidos que fueron aliados a ellos en las elecciones pasadas.
Además de esas organizaciones que se citan en la ilustración, hay que añadir dos nuevas, que no pueden aportar datos porque esta será su primera participación electoral y no hay forma de obtener alguna data confiable, solo especulaciones basadas en lo que se ve desde afuera y el accionar de sus líderes.
No está de más mencionar el hecho de que en uno de los partidos aliados, el de la Liberación Dominicana ha habido un éxodo considerable de militantes y dirigentes medios que socavan de manera inequívoca la estabilidad electoral de esa organización, algunos se fueron a Fuerza del Pueblo, otros han pasado a formar filas en el Partido Revolucionario Moderno, pero lo que más llama la atención es que después de formalizada la alianza entre el PRD, PLD y FP, muchos militantes han seguido renunciando y esta vez no estan pasando a FP sino que se han ido al lado oficialista.
Podría ser esto una materia a la que la oposición debería ponerle mucha atención. Esta conducta no está aportando a la alianza, dado que no se están quedando dentro de ella sino que la están abandonando, algo raro porque debería garantizar cohesión y esperanza el ir en bloque para retar al oficialismo que se muestra
sólido, sin renuncias y en aparente tranquilidad después de algunos incidentes producto de las encuestas internas que provocaron disgustos entre algunos de sus miembros. Ahora mismo esa maqinaria que aún no sale en campaña, pero que está armando un equipo balanceado para esos fines, se ve como la fuerza con más poder electoral en este momento.
Solo basta hacer el ejercicio de suma y resta, no hay que ser un genio para no interpretar bien lo que nos están diciendo los números -en este momento- para entender donde está la ventaja electoral. Claro está, hasta el día de las elecciones cualquier cosa puede suceder, pero a juzgar por lo que se ve en esta tabla más los resultados de todas las encuestas serias realizadas hasta el día de hoy, el Presidente Abinader tiene en este momento el camino expedito para una reelección.